PRIMER DIA DEL TALLER “ METAMORFOSIS” de Sixto Paz
Narrado por Mayra Fdez.
10 de Diciembre 2011 en Puebla
Desde la noche anterior ya nos
preparábamos mi mamá y yo para levantarnos muy temprano y alistarnos para ser
de nuevo las primeras en llegar al día mas emocionante de los eventos de Sixto
en Puebla, el Taller de Metamorfosis, que tan solo por escuchar esta palabra,
nos pasaba por la mente el gran significado y poder que esta posee.
En la noche anterior ya teníamos
todo listo, la libreta, la cámara, y el libro de trabajo para el taller, pensé
en dejar la video cámara porque realmente dudaba un poco de poder filmar el
taller ya que esto era exclusivo y de privacidad para Sixto, ese era mi pensamiento
que tenía en mi mente aunque ya mas tarde en el taller, cambió de condición.
Habíamos desayunado algo ligero
en la habitación porque sabíamos anticipadamente que haríamos ejercicios de
meditación por lo que no se requería de la ingesta excesiva. Ya nos dirigíamos
al auditorio y tuvimos que esperar un poquito en la entrada, porque los
bellboys acomodaban las sillas de manera que quedaran en forma de herradura
poniendo hasta la punta superior de esta, la mesita con el proyector para que
Sixto conectara su computadora. Después llegó el momento de entrar y nos
poníamos de nuevo en primera fila de las 2 que se formaron en herradura para
estar lo más próximo al lugar de Sixto, sin embargo pasó lo mismo que comentaba
en un capitulo anterior, que no faltaba a veces alguna persona que engrandece
su ego por capricho, y fue que 2 señoras con todas sus ganas se colocaron por 2
lugares antes de la fila que nos encontrábamos mi mama y yo, así que nuevamente
reímos sobre esta situación ya conocida.
En eso como ya era costumbre se
hizo presente con un paso más calmado la entrada de Sixto, que venía tan
sonriente y con un aire de frescura. Todas las personas ya estaban acomodadas
en sus sillas, a la espera de las instrucciones de Sixto, que muy amable
explicó todo lo que se realizaría en el taller. Entonces ya todos conocimos el
programa de actividades de ese día, y sentíamos mucha emoción de lo que íbamos
a hacer, así que estábamos listos para comenzar. Y aquí es donde me pude dar
cuenta a través de las palabras de Sixto en relación con grabar el taller, que accedía
dando permiso para filmar o grabar su taller, pero fue demasiado tarde para mi,
ya que mi mente había decidido dejar la video cámara en reposo.
Empezamos haciendo ejercicios de
respiración para seguir con una visualización y recibir la energía del cosmos y
así fortalecer nuestros chakras, posteriormente para crear una cúpula de
protección para nosotros mismos, para el lugar donde estábamos y para nuestra
familia y hogares.
Y seguimos haciendo otras
visualizaciones, e iniciamos con varias meditaciones donde traducíamos el
significado de lo que percibíamos y veíamos; todo esto asistido generosamente por Sixto,
que ya creaba un ambiente de profunda energía de alta frecuencia.
Estábamos casi a la mitad de las
actividades a realizar, cuando Sixto nos dió un pequeño receso, para despejar
un poco la mente y relajar mas el cuerpo, así aprovechando de que algunas
personas que no habían desayunado, por haber comenzado a las 9am el taller, fueron
inmediatamente a la máquina dispensaria de alimentos empacados y de café, para
calmar su hambre.
Regresando hicimos varias
meditaciones más y en cada una íbamos interpretando y razonando el significado
que estas llevaban consigo para el mejoramiento de la conciencia de los presentes.
Ya se acercaba las 3 de la tarde
hora en que el taller debía finalizar, entonces Sixto despidiendo la jornada,
nos comentó que para el día siguiente del taller haríamos mucho mas cosas para
entrenar nuestra mente y pulir nuestras capacidades psíquicas, y todo el
público se sintió muy emocionado al oír esas palabras.
Entonces algunos se despedían de
Sixto, otros se quedaban con él para hacerle algunas preguntas de las
actividades que habíamos realizado, mientras tanto mi mama y yo nos íbamos a la
habitación para dejar nuestro material de trabajo y dirigirnos a conocer el
restaurant del hotel que muy sencillamente estaba muy accesible económicamente.
Con todo y que estaba el sol, se
podía sentir el frito típico de Puebla a esa hora, por lo que fuimos un poco
abrigadas a tomar nuestros alimentos. Estando en el restaurante nos dimos cuenta
que solo habían otras 3 personas en otra mesa y nosotras 2, enfrente de nuestra
mesa había una mega pantalla de TV pasando una película. Entonces llega la
mesera ante nosotras con el menú, y ya después de escoger nuestro platillo nos
disponíamos a esperar a que nos lo trajeran.
Mi mamá había pedido unos tacos
dorados con pollo y un spaguetti, y yo como no me decidía que alimento
consumir, me fué fácil solicitar una milanesa de res con papas también con
spaguetti. Entonces veíamos mientras que
llegaban nuestros platos la mega TV de enfrente, y fue en eso que estábamos
concentradas en la película, cuando a lo lejos me pude percatar de una silueta
que me era muy familiar, OOH! Pero si es Sixto!!,… le decía muy asombrada a mi
mamá. Sixto venía solo sin nadie del staff, y mi mente se asombraba por la
rareza de ver a Sixto llegando solo al restaurant. Y entonces Sixto con una
sonrisa muy peculiar se acercó a nuestra mesa y recargando sus manos en el
respaldo de una silla que estaba enfrente de mi, inició una conversación amena
con nosotras, y en la que mi mamá inmediatamente lo invitaba a sentarse a
nuestra mesa y él gustoso accedió a la invitación.
Ya en la mesa seguíamos conversando
y nos contaba un poco de su familia y nos preguntaba acerca de nuestro trabajo.
Fue entonces que llegaba a la puerta del restaurant la señora que lo asistía
vendiendo su material en las conferencias y saludándonos la invitábamos a
nuestra mesa, ya estando ahí, ella nos comentaba que también estaban por
arribar los organizadores del evento y que sabía que tal vez estuvieran
esperando a Sixto en el Lobby del hotel, entonces nos quedamos mirando todos,
pero nadie decía nada, y rápidamente tomé la iniciativa de expresarles que yo
iría a buscarlos al Lobby y avisarles. Ellos aceptaron e inmediatamente aligere
mis pasos hacia la recepción del hotel, donde podía visualizar la presencia de
los organizadores en el Lobby.
Ya estando cerca de ellos, les
comenté que Sixto los esperaba en el restaurant, y ellos me agradecían por el
mensaje enviado, y gustosos se fueron conmigo para llegar al restaurant.
Y entonces nos cambiaron a otra
mesa mas larga para que todos pudiéramos sentarnos juntos, y cada quien pedía
sus alimentos, Sixto veía que nos habían llevado a mi mamá y a mi nuestro plato
con spaguetti y enseguida se le antojó y pidió a la mesera que le llevaran uno
igual, así mismo como la limonada que bebíamos, y todos a la vez pidieron su
limonada también así como solicitaron sus alimentos libre de toda especie de
carne. OH NOOO!! Exclamé mentalmente, me sentía muy apenada con ganas de
desaparecer de ahí o de esconderme bajo la mesa; ¡¡¡como era posible que
hubiese pedido un platillo con carne!!!, estando ahora presente Sixto Paz en mi
mesa frente a mi silla, podía sentir la presencia de su mirada ante mi plato
que ahora lo veía tan grande junto con su contenido, me empezaba temblar un
poco la mano y la mirada, y entonces permanecí callada ante las pequeñas bromas
que los demás del staff le hacían a una de sus integrantes que apenas estaba
por tomar disciplina en la alimentación , SÍ , ella era mi tocaya porque se
llamaba como yo, y muy casualmente también provenía de Veracruz solo que ella
era del norte del estado, pero ya radicaba por muchos años en Puebla. Sus ojos
de todos ellos pasaban desapercibidos ante el hecho que mi mamá y yo
consumíamos alimentos con carne. Sin embargo para mi fué como un cocotazo que
me daban los maestros guías al no aplicar lo instruido por Sixto, y con esa
presión se me quitó el hambre y no terminé de consumirlo todo, aunque mas pena
me daba por eso. En la mesa todos nos presentábamos, y algunos del staff me
afirmaban que mi cara se les hacia muy conocida y que tal vez nos habíamos visto
en otro lado, para mi fue asombro porque en mi mente recorrían una serie de
lugares tratando de encontrar el indicado donde nos hubiésemos encontrado, pero
no podía recordarlo, así que mi mamá expresó inmediatamente acordándose del
lugar, y este había sido en Córdoba en una expo de terapias holísticas,y es
como entonces ya me había llegado la respuesta a mi búsqueda de recuerdos.
Ya todos habíamos terminado
nuestros alimentos, y los del staff le recordaban a Sixto que a las 5pm iba a
tener una entrevista con un canal de TV de Puebla, y que seria en el lobby del
hotel, entonces, Silvia la asistente de ventas de libros de Sixto y yo
exclamamos que deseábamos tomar una foto del grupo, y todos muy gustosos se
acomodaban alrededor de Sixto para que la mesera nos tomara la foto. Después de
eso, Sixto con los del staff se despedían de nosotras para ir al encuentro con
las personas de la TV.
Mi mamá y yo le preguntábamos a
Alma que es integrante del staff, si conocía alguna tienda de ropa de la India,
y ella inmediatamente nos dio el domicilio. Entonces mi mamá y yo nos fuimos a
la habitación para prepararnos a salir a dar una vuelta por el centro de
Puebla.
Ya en la salida de nuestra
habitación podíamos observar enfrente de esta, el lobby donde ya estaba Sixto
dando una entrevista, y nos apresuramos para verlo por detrás de la puerta de
cristal de la entrada del lobby, y en la que pude visualizar solamente a Silvia
que observaba con detenimiento la entrevista, y tomando algunas fotos de
recuerdo. Ella me saludó desde adentro y me hizo una seña para que yo me
dirigiera donde estaba ella, así que mi
mamá y yo entramos por la otra puerta de la entrada de la recepción para no
tener que abrir la del lobby y causar algún ruido que se entrometiera en la concentración de la
entrevista. Y llegué a un lado de Silvia muy calladamente y ella me susurraba
que ya se estaba transmitiendo por el canal de TV en vivo, yo me ponía muy
atenta a lo que decía Sixto, que en un espacio breve de comerciales, volteaba a
vernos, percatándose que mi mamá y yo estábamos ahí cerca. Fué cuando Silvia me
comentó en voz baja que los demás del staff le habían pedido que nos preguntaran
a mi mamá y a mi, si queríamos ir con ellos y con Sixto a un restaurant para ir
a cenar. Nosotras muy sorprendidas de tan cordial invitación y que no nos
esperábamos ese detalle tan ameno por parte de los organizadores, rápidamente
aceptamos ir, y entonces nos pusimos de acuerdo para encontrarnos en el lobby a
las 9pm después de que Sixto terminara su segunda entrevista con el grupo de
locutores de radio.
Entonces le explicamos a Silvia
que iríamos a dar una vuelta al centro y que estaríamos puntuales para la
reunión. Partíamos en un taxi buscando la dirección que Alma nos había
proporcionado sobre la tienda de ropa hindú. Llegamos a dicha tienda, la cual
me pareció magnifica por su extenso surtido en artículos de la India, y muy
amablemente el dueño nos asistió enseñándonos su tienda, como si ya nos estuviera
esperando. Fue algo grandioso para mi ya que me encanta todo lo que sea de la
India, y entonces muy sonriente acepte el tour por la tienda, hasta que me decidí
comprar una blusa, una falda y algunas como bufandas, el dueño nos seguía
haciendo platica regalándonos de obsequio unos tubos con incienso, que
cordialmente nos invito a que escogiéramos de todo el surtido de aromas que
poseía. En la conversación nos presentábamos y le comentaba que yo soy de
Veracruz, y entonces la expresión de su cara seria, se tornó muy alegre al
escuchar la palabra Veracruz, ya que nos comentaba que él había conocido todo
Veracruz en sus pasadas vacaciones y que conocía a algunas personas de origen
Árabe que ya radicaban en algunas zonas de Veracruz. Fue como nos hicimos amigos,
intercambiando nuestras tarjetas de presentación y manifestándome que ojala y
un día de estos volvería a ir a Veracruz y nos visitaría en mi negocio, y muy
felices nos despedimos para luego mi mamá y yo tomar un taxi para regresar al
hotel porque ya se acercaba la hora de la reunión. Llegamos por la otra entrada
del hotel y rápidamente nos fuimos a la habitación para arreglarnos un poco y
estar presentables para la cena con Sixto, así que una vez lista salimos al
encuentro de dicha reunión, donde podíamos visualizar en el lobby a los del
staff con unas 3 personas más como invitados, y nosotras que hacíamos arribo de
nuestra presencia. Ya el staff nos saludaba y uno de ellos me comentaba que no
sabia si Silvia nos iba a poder hacer llegar la invitación debido a que
desconocían el numero de nuestra habitación. Pero lo importante que ya
estábamos ahí juntos como hermanos de Luz compartiendo el profundo amor que a
través de Sixto nos había unido en una gran hermandad.
Yo podía apreciar que aun le
estaban aplicando a Sixto una entrevista por radio internet, y me acerqué más
por donde yacía sentado Sixto y enseguida él volteo un poco su mirada hacia
donde yo estaba y con una seña que hizo con sus ojos me indicó de manera cómica
que se sentía un poco agotado por la duración de las entrevistas, ese fue el
mensaje que me transmitió su mirada y efectivamente así era, porque Silvia
podía ver la cara de Sixto con pequeños rasgos de cansancio por toda la jornada
del día y ella me lo expresaba, dándole yo la razón de su observación. A esa
hora que era casi cerca de las 9pm, ya estaban casi por finalizar la
entrevista, pero como estábamos en el tiempo de las posadas y fiestas
decembrinas, llegaron al lobby una gran cantidad de gente que eran empleados de
una empresa grande de Puebla y que llegaban al auditorio que estaba cerca del
lobby para celebrar su fiesta navideña, pero hacían mucho ruido que los del
staff tuvieron que indicarles que le bajaran a su volumen, aunque no muchos lo
hacían, con esa turbulencia de ruidos seguía su curso la entrevista de Sixto,
hasta que POR FIN!! Se acabó la entrevista y Sixto lanzaba un pequeño suspiro
de liberación, entonces Alma del staff me condujo al lado del locutor para
hacer nuestra presentación de amistad, y nuevamente intercambiábamos tarjetas
de presentación. Así mismo los del staff invitaron a los del radio para que
todos acompañaran a Sixto a la cena.
Pero OOOOH Sorpresa!!!, no se
esperaban que Sixto debido a su notable cansancio, nos indicara que prefería
quedarse a cenar en el restaurant del hotel. PLOFF!!!, el proyecto de cena con
Sixto se nos derrumbó, y lo más cómico fué que todos íbamos bien vestidos para
la ocasión, con cámaras y todo lo ideal para una velada con Sixto, y todo el
escenario programado se esfumó dando prioridad a la palabras de Sixto.
Entonces no quedó otra que
dirigirnos al restaurant el cual no había nada de gente y estaban recogiendo
todo para cerrar. Llegamos y al instante la encargada nos dijo que ya no había
servicio. Entonces Sixto le expresó con sus palabras suaves que solo quería
algo ligero y no tan complicado de realizar, así que la encargada accedió a la
petición de Sixto porque ya sabia ella de quien se trataba. Nosotras y los del
staff solo podíamos ver nuestras caras de desaliento, pero entonces ellos
seguían en pie de ir al restaurant previsto para Sixto, y nos preguntaron a mi
mamá y a mi si queríamos ir con ellos de todas maneras. Pero yo pensé enseguida
que lo mejor era que nos quedáramos a acompañar a Sixto en el restaurant para
no dejarlo solo, que para ese momento lo único que quería Sixto era comer algo
rápidamente e irse a su habitación a descansar. Así que nuevamente con la pena
les dije a los del staff que nos quedaríamos, y al cual también se nos unió
Silvia que igualmente se sentía un poco agotada. Entonces los del staff se
fueron y nosotras nos quedamos a acompañar a Sixto, que inmediatamente pedía un
café con leche y un sándwich ligero con queso, lo mismo pedía Silvia, mi mamá y
yo solo que en lugar de café pedimos té de manzanilla.
Compartíamos el cansancio de
Sixto el cual estuvo un poco callado en la cena debido a su agotamiento, y
comíamos al ritmo de él, haciendo comentarios de la jornada. Sixto terminaba
rápidamente su cena, y se quedaba viendo un poco la TV que tenían prendida frente
a nosotros. De repente se levantaba ofreciéndonos sus disculpas por dejarnos
solas, pero indicaba que ya requería descansar, a lo que rápidamente le dimos
la razón y con un ligero saludo de despedida apresuró su paso a la salida para
irse por el pasillo del hotel rumbo a las escaleras. Nosotras terminábamos
nuestra cena y también nos despedíamos, para ir a descansar y reparar nuestra
energía para la jornada del domingo en la continuación del taller.
Ya en nuestra habitación nos
recorría por nuestra mente, el grato recuerdo de ese día que pasamos muy de cerca
y en convivencia con Sixto, nos sentíamos muy felices de saber que habíamos
formado un grupo de grandes amigos y hermanos
del mismo sendero y que no existía competencia, ni egos, ni nada que
estuviera en desequilibrio con nuestra amistad. Y esto nos hacia primeramente
agradecer a Dios por la oportunidad que
nos otorgó de asistir a este evento, y de agradecer a Sixto por sus enseñanzas
y porque nos unió junto con los organizadores en una gran hermandad de Luz.
CONTINUARÁ…………
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